Esta entrada es un monográfico de uno de los lugares que más me han fascinado de México: el Parque Nacional del Nevado de Toluca. Es un volcán dormido de 4600 m. de altitud, en cuyo cráter hay dos lagos (Sol y Luna) y un paisaje volcánico- lunar alucinante. Fui el martes con mi colega Óscar y me gustó tanto que ayer volví con mi recién comprada tienda de campaña para pasar una noche en el mismo cráter.
La subida del martes fue algo accidentada, nos perdimos una vez al subir y otra al bajar, al intentar atajar. Corregimos metiéndonos por en medio del cerro, sin sendero, pero lo conseguimos. Conocimos a un francés y un alemán (no es chiste) que perdimos al ir los chicos escopetadísimos, por cierto por el camino malo, con lo que se perdieron aún más que nosotros.
Así que volví a subir, esta vez por el buen camino, y disfrutando del imponente paisaje, para acampar en la cima. No se oía nada, pero nada, ni había nadie. Increíble. Pasé algo de frío por la noche, pero realmente mereció la pena ver las estrellas sin contaminación lumínica, la luna reflejada en el lago y esta mañana un impresionante amanecer sobre las nubes, el aire puro, el silencio y el mero hecho de acampar en un cráter volcánico a 4600 metros de altitud.
Os dejo las fotillos de rigor para que lo veáis vosotros mismos y una recomendación de, al menos subir, si algún día tenéis la oportunidad.
PD: Por lo visto el gobierno mexicano tiene pensado vender el espacio a un fondo de inversión japonés que tiene pensado construir hoteles, etc donde no hay absolutamente nada, sólo naturaleza virgen. Desde esta modesta tribuna animar a las plataformas que tienen pensadas actividades para parar semejante barbaridad.
Caseta de control de la cima
El cráter
Los montañeros!!
Parque del Venado, donde empieza el recorrido
Mis vistas (lago la Luna)
Lago de la Luna
Lago del Sol
Impresionante, verdad?
Niños en el pueblo Raíces pidiendo dinero para el Día de Muertos
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